Grecia se hunde en su propia mentira.

miércoles, 14 de abril de 2010


La semana pasada Grecia se hundía por mentir y "falsificar" sus datos económicos. Nos quería hacer creer que su economía iba bien, cuando en realidad era todo lo contrario. Debido a esta mentira, los demás países no se fían a la hora de prestarle dinero para que se reponga; por lo tanto, quien le preste dinero le va a cobrar el 7% de los intereses.

Si paga el 7% por el dinero prestado, Grecia estaría pagando cuatro puntos por encima de alemania y tres puntos más de lo que paga España por los suyos.
Esto lo decidieron los intermediarios económicos que eran los portavoces de las personas que se ofrecieron a prestar dinero.
Berlín quiere que Atenas siga recurriendo a los mercados, y por tanto que pague el tipo de interés como castigo. Este empeño en ayudar a Grecia y que Grecia siga en los mercados es por que a los países miembros de la Unión Europea no les interesa que el valor del Euro (su moneda) pierda su valor al estancarse en una bancarrota. De este modo, nadie "compraría" el euro por que sería una moneda sin importancia.
Uno de los rumores que avivó la tensión fue que los bancos griegos estaban perdiendo grandes cantidades de dinero que los clientes retiraban para ingresarlo en otros bancos europeos, ya que no se fiaban del sector financiero de Grecia.Si esto fuese verdad, sería un problema más para la recuperación del país.

En mi opinión, Grecia debería haberselo planteado mejor antes de cometer el engaño y, como consecuencia, llegar a la situación en la que se encuentra ahora. Yo creo que en estos temas económicos lo correcto es decir siempre la verdad y si vas decayendo en el sector financiero, es mejor pedir ayuda en vez de mentir.
Por otro lado, todo el mundo comete un fallo, y ya que todos somos humanos, todos nos equivocamos. Y si Grecia ha cometido un error, deberíamos ayudarle en vez de machacarle aún más, aunque eso no significa que no se le cobre un tanto por ciento de interés al prestarle dinero.
Si cuando nosotros cometemos fallos, nos gusta que nos perdonen, deberíamos hacer lo mismo con los demás aunque acepten sus consecuencias...¿no?
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